miércoles, 27 de agosto de 2014

Doble juego-Double game-Jogo duplo

Nuestros políticos nos están dando una lección ultimamente de doble juego,  es decir de cómo sus actos privados no se corresponden en absoluto con su imagen pública, y con ello no entro a juzgar desde un punto de vista legal ni siquiera ético su comportamiento, simplemente constato que al salir los trapos sucios o simplemente ocultos a la luz nos enseñan como las personas no son lo que parecen.




Es evidente que habitualmente esa realidad que nos esconden suele ser mas mezquina y e incluso rastrera que la imagen exterior que suelen mostrar de honradez y rectitud. aunque en ocasiones el doble juego es totalmente a la inversa, gente por la que no darías ni un real que en la intimidad de sus vida privadas estan realizando actividades encomiables de ayuda a los demás o a la comunidad en general.



Pero en fin mi reflexión sobre el doble juego no se limita a los políticos, o es que acaso practicamente todos nosotros no tenemos también 
una doble cara, una vida hacia el exterior y una vida en la intimidad de nuestras casas, familias, trabajos o incluso soledad.









Aquel padre de familia que es un ejemplo para todos que luego resulta es de lo mas mezquino con sus hijos y los tiene amedrentados, aquella madre piadosa y circunspecta que tiene la falda demasiado corta, aquel jefe ideal que frente a sus superiores es un líder comprensivo y que si rascas un poco ves que solo se interesa por su silla y tiene  acobardados a sus subordinandos.




Y es que el doble juego es consustancial al ser humano, desde siempre han habido amantes secretos para ellas y ellos, queridas en pisos discretos de la misma o de otra ciudad, segundas familias en distintos continentes, espias y contraespías, gente falsa, falsos beatos y falsos ateos, heterosexuales de pacotilla y homosexuales de moda....será que al final todo el mundo miente?



O será que cualquier ser humano tiene dos caras, dos realidades distintas, una que puede o quiere enseñar, aquella que se adapta mejor a los usos sociales a lo políticamente correcta, y otra privada, que es menos confesable o que simplemente uno quiere guardar para sí....y quien es por tanto una persona auténtica? Quizas solo aquella que se parece entre su yo público y su yo privado, aquella mas transparente, en definitiva la más sincera!